En todo el mundo se vive una crisis; las calles poco a poco se vuelven más desérticas y las ciudades parecen pueblos fantasmas; pero irónicamente los hogares resplandecen más que nunca. Nuestras casas son ahora más que un refugio, son toda nuestra vida; a veces me pregunto que hubiera pasado sin en lugar de este encierro donde todo está al alcance de un clic, hubiera sucedido en un mundo donde apenas se recibían telegramas y una carta cada ciertos meses, seguro la zozobra sería inmensa o quizás no, quizás surgirían grandes inventos derivados del aburrimiento o tal vez recetarios repletos de nuevas recetas donde estas donas de plátano horneadas serían de las primeras en figurar en mi lista. Pero aquí estamos conectados a través de esta red de datos que viajan de un lugar a otro sin parecer cesar nunca.
Yo me he distanciado de las noticias y he encendido mis hornos para cocinar más que nunca; incluso he probado cosas nuevas como la masa madre que ahora mismo reposa en la encimera de mi cocina y va viento en popa; también estas donas son un invento nuevo fruto de las largas horas de habitar estas cuatro paredes. Ahora más que nunca debemos sacarle el máximo provecho a lo que tenemos en casa y eso significa preparar recetas con todo lo que tengamos a la mano y no desperdiciar nada así evitamos salir constantemente además de que ayuda mucho a mantener la cordura y la paz mental crear algo.
En mi casa deseaban con incansable anhelo unas donas; es costumbre nuestra que durante pascuas comer donas esto surgió hace unos cuantos años; solíamos vivir en la linde de un húmedo bosque donde no había muchas personas o establecimientos a la redonda pero todos los años durante pascuas las calles de la zona se cerraban para recibir una marejada de puestos ambulantes de todo tipo; pero principalmente de comida. Paseando por ahí descubrimos uno que nos cautivó y se trataba de un puesto de donas caseras de tamaño ingente 🍩 eran enormes a mi solían durarme hasta dos días, eso si resistía comerlas porque eran deliciosas. Hoy será el primer año que no las probemos en parte por la cuarentena mundial que vivimos y en parte porque nos mudamos y ya no vivimos tan cerca de ellas. Así que como homenaje he decidido preparar estas donas de plátano 🍩 que para ser justos poco tienen que ver con aquellas donas, sin embargo también son una delicia. Sigamos reinventando nuestros días con aventuras culinarias que nos hacen viajar y revivir esos días casi tan real como si estuvieramos ahí, mientras el mundo vuelve a su rumbo, deja que la cocina te transporte a días alegres y felices, que a la vuelta de la esquina seguro se aproximan muchos así.
- 2 tzas. Harina de trigo todo uso
- 2 cdtas. Polvo para hornear
- ½ cdta. Sal
- 3 Plátanos maduros
- ¼ tza. Azúcar
- 1 huevo
- ¼ tza. Aceite
- 1 tza. Leche
- 1 cdta. Extracto de vainilla
- 5 cdas. Azúcar glass
- 3 cdas. Cocoa en polvo sin azúcar
- 1 a 2 cdtas de leche o agua
- Cernir en un recipiente profundo la harina junto con el polvo para hornear y la sal; mezclar bien y reservar.
- En otro bowl machacar los plátanos hasta obtener un puré.
- Incorporar al puré de plátano, el azúcar, el huevo, aceite, leche y el extracto de vainilla.
- Mezclar todos los estos ingredientes.
- Agregar los ingredientes secos poco a poco hasta incorporar, evita batir demasiado para que tus donas queden esponjositas y suaves.
- Colocar en un molde para donas* previamente engrasado y enharinado.
- Hornear a 180°C por 15 minutos o hasta que al insertar un palillo este salga limpio.
- Dejar enfriar por 15 minutos en el molde y desmoldar con cuidado.
- Preparar el glaseado mezclando todos los ingredientes hasta obtener una mezcla espesa como si fuera miel.
- Cubrir las donas con el glaseado.
- ¡Buen Provecho!
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